Pacto entre generaciones
Pacto entre generaciones
En el último blog habíamos anunciado un reporte de la fiesta de nochevieja. Bueno, fue maravillosa - vean la foto que esta al lado, refleja muy bien el aire de esa noche y dice más que cien palabras.
La mañana siguiente, la primera de este año 2012, también tuvo su tono especial, esta vez más bien melancólico: Pelayo, un señor mayor de edad, a quien no siempre le ha ido fácil en la vida, nos visitó, y acompañado por su guitarra nos cantó del amor, de una manera triste y conmovientemente linda a la misma vez.
En realidad, la generación 70+ ya esta intensivamente relacionada con lo tuyo: Como alma madre de la pensión que alberga los numerosos voluntarios que llegan, Chely los hace sentir que tienen un hogar, no importa lo lejos que estén de sus patrias. Y la señora que donó un pozo para lo tuyo también forma parte de esa generación.
Y ahora parece que se está formando la próxima conexión.
Para explicar como se origino, hay que ampliar un poco: A principios de este siglo la fruta milagrosa del noni (Morinda citrifolia L. ) era muy cotizada como remedio natural para prevenir y hasta curar el cáncer. Teodoro, un ingenioso Español, construyo una planta para procesar el noni en Las Cañitas, un pueblo al este de la Ciudad de Panamá. Desafortunadamente el noni tiene una desventaja: Su sabor es – para decirlo moderadamente – no muy agradable. Y la fama de su potencial medicinal también sufrió un poco. El dicho ‘No-ni se come, no-ni se vende’ empezó a pasar de boca en boca. La pequeña planta procesadora tuvo que cerrar sus puertas, pero le iba a tocar aun peor: El año pasado Las Cañitas fue inundada por un diluvio que cubrió las casas con una capa de agua de tres metros.
Abdy, un ingeniero de técnica alimenticia que apoya a lo tuyo como consultor, llevo Silke a Las Cañitas para que conozca a Teodoro. Entre los dos surgió simpatía a primera vista, la cual se profundizo aun mas, cuando le enseño a Silke – justo al lado de la planta – el proyecto que mas le importa a ese señor. El asilo de ancianos de Las Cañitas, el cual el construyo y ahora gestiona con el apoyo de la Iglesia Episcopal de Panamá. El asilo también fue inundado, aun se ven los daños que causo el agua.
Quizás Abdy organizo este encuentro a propósito – gracias Abdy – porque ahora parece que se va a formar un negocio que beneficia bien a ambos lados. Estamos averiguando si podemos comprar la planta, y dado el caso, Teodoro usaría el dinero para seguir acondicionando el asilo. Porque el tiene la visión de entregarle el cargo a gente mas joven algún día para que el pueda retirarse a jugar domino con los otros señores mayores de edad.
En lo tuyo va a renacer la planta procesadora – para guardar en conserva los múltiples sabores de los frutos tropicales para que los disfruten los amigos del paladar, cercanos y lejanos.
Ah, con una excepción: El no-ni-se-come ...